Rinoplastia Ultrasónica en Oviedo

2. Nuestra filosofía a la hora de practicar rinoplastias.

La rinoplastia es una cirugía mayor que implica un cambio muy notorio en la fisonomía del paciente. Por eso, hay que ejecutarla sirviéndonos de todos los medios a nuestro alcance y, sobre todo, con mucha responsabilidad y profesionalidad. Nuestra filosofía a la hora de practicar rinoplastias se sustenta en cuatro puntos:

2.1 Rinoplastia abierta

A diferencia de la rinoplastia cerrada, la abierta expone la estructura y los tejidos de la nariz ante los ojos del cirujano. Sólo así se puede garantizar que la nariz resultante de la operación mantendrá su funcionalidad al cien por cien, al tiempo que cumple con las exigencias estéticas del paciente.

Somos conscientes de que en una cirugía de nariz está en juego la fisonomía facial de paciente, por lo que no podemos apostar por procedimientos que no faciliten los resultados.

2.2 Rinoplastia ultrasónica.

De entre todas innovaciones tecnológicas llamadas a perfeccionar la técnica de la rinoplastia, el bisturí ultrasónico ha sido el más determinante en los últimos años. Una herramienta que facilita la precisión de los movimientos del cirujano, al tiempo que reduce la inflamación, las hemorragias, los hematomas y el tiempo de recuperación.

Definitivamente, la rinoplastia ultrasónica mejora tanto resultados como la experiencia del paciente.

2.3 Rinoplastia basada en la comunicación entre cirujano y paciente.

Tan importante como saber ejecutar una rinoplastia es saber entender qué desea el paciente. Cómo quiere que luzca su nuevo rostros. Para ello, hay varias herramientas, y estamos obligados a usarlas todas.

La primera, por supuesto, es el diálogo. Este debe ser sincero: el cirujano debe aconsejar al paciente y hacer que entienda dónde están los límites de lo posible; además, debe comprender cuáles son los rasgos que el paciente quiere eliminar y cuáles desea conservar, pues no todos los pacientes quieren tener “la misma nariz”.

2.4 Rinoplastia apoyada en la planificación virtual.

Pero además del diálogo, actualmente las nuevas tecnologías nos aportan otra herramienta de gran utilidad: la planificación virtual. Es decir, la posibilidad de ver en una pantalla el rostro del paciente con la nariz que tendrá después de la rinoplastia.

Gracias al uso de fotografías, escáneres y simulaciones por ordenador podemos anticipar el resultado de la operación y así asegurarnos de será el deseado por el paciente.

3. Así practicamos la rinoplastia.

Una rinoplastia llevada a cabo con las mejores innovaciones biosanitarias no requiere ingreso hospitalario ni anestesia general. En caso de rinoplastias complejas, el cirujano puede aconsejar otros protocolos.

3.1 Diagnóstico y planificación

El primer deber de un cirujano radica en conocer a la perfección la estructura anatómica de la nariz. Así sabe cómo planear el abordaje cada intervención para conseguir los resultados deseados. Esta visión puede ser compartida con el paciente gracias a los estudios computerizados, que ofrecerán una imagen virtual de cómo se espera que resulte la rinoplastia.

3.2 Anestesia General

En la clínica del doctor Federico Rehberger, disponemos de médicos anestesistas con amplia experiencia que simplifican las intervenciones y permiten una reincorporación más rápida a su rutina. Además, la presencia del anestesista en quirófano aporta todas las garantías de seguridad para el paciente.

3.3 Bisturí ultrasónico

La rinoplastia abierta comienza con una incisión en la columela para abordar todo el esqueleto óseo cartilaginoso hasta la parte más alta de la nariz. A continuación, comienza el trabajo con el bisturí ultrasónico.

Esta herramienta sustituye a las que se utilizaban en las rinoplastias clásicas (escoplo, martillos, limas…) que hacían que la cirugía perdiera precisión y ganase en agresividad.

El terminal de ultrasonidos emite una vibración de alta frecuencia que va limando el dorso óseo de la nariz, y reduciéndolo progresivamente. Su precisión es milimétrica, lo que nos permite ganar en predictividad y garantizar que la función respiratoria de la nariz se conserva.

Además, mejora el postoperatorio y reduce los plazos de incorporación a la vida ordinaria del paciente.

Rinoplastia Tradicional

Rinoplastia con Ultrasonidos

4. ¿Cómo es la recuperación y el cuidado postoperatorio en una rinoplastia ultrasónica?

4.1 Recuperación

• La rinoplastia ultrasónica es una técnica mucho menos cruenta que la clásica. Esto beneficia en la recuperación del paciente. Las posibilidades de desarrollar hematoma son menores y, cuando aparecen (habitualmente en párpados), se reabsorben en menos tiempo (entre 7 y 15 días).
• Por otro lado, también la inflamación es menor. Alcanza su máximo en la primera semana y, posteriormente, se va reduciendo. La mayor parte de la inflamación desparece pasado un mes. Quedarán resquicios que pueden provocar un efecto de asimetría en el rostro del paciente, pero eso no debe preocuparnos, pues es una inflamación residual que acabará por resolverse con el paso del tiempo.
• Pasados 15 días, si todo va bien, el paciente puede incluso empezar a practicar deportes aeróbicos que no supongan mucho impacto sobre las articulaciones: bicicleta estática, marcha, etc. Al mes, es posible que ya se le permita el running u otros deportes sin contacto.  Y, a los tres meses, también los deportes de contacto menos agresivos.

4.2 Cuidados postoperatorios y citas.

• A menos que sea necesario, no aplicaremos taponamientos nasales; esto es importante, puesto que que mejora muchísimo la comodidad del paciente en el postoperatorio, permitiéndole respirar por vía nasal. Sólo durante las primeras 48 horas, el paciente llevará una bigotera, es decir, una gasa pegada al labio superior que recogerá restos de hemorragia y secreciones.
• Para contener la inflamación y dar estabilidad a los huesos, al paciente se le coloca una férula y unas tiritas sobre el dorso nasal y sobre la punta nasal. A los siete días retiramos esas medidas, además de los puntos.
• Un mes después de esto, se pautará la siguiente revisión, en la que el paciente percibirá ya una mejoría muy visible, debido a la desaparición de hematomas y de gran parte de las asimetrías por la inflamación.
• En ocasiones, se recomienda la aplicación de tiritas en el dorso nasal durante el tiempo que el paciente esté en casa. Esto, en algunos casos, mejora los tiempos de reabsorción de la inflamación.
• Es importante que el paciente duerma boca arriba, con doble o triple almohada, incorporado unos 45º. Las almohadas en forma de herradura (las que se suelen usar para dormir en los aviones) ayudarán a que no se gire la cabeza.
• Es muy necesario el uso de pulverizadores nasales de suero salino para ir expulsando mucosidades y costras. Por otro lado, el paciente nunca deberá sonarse la nariz con fuerza.